Turismo naturalistico

Turismo de Naturaleza

Por mucho tiempo, el turismo era considerada como una «industria blanca» sin necesidad de señalar sus impactos sobre el ambiente social, cultural y ecológico. En la década de los 70 se escucharon las primeras voces de crítica. Sin embargo, tomó más de una década para que empezaran a prestar atención a las consecuencias del turismo.

Actualmente, casi todos los interesados en el turismo reconocen que este puede tener impactos negativos sobre el ambiente y que esos impactos deben controlarse. Es necesario que el turismo se vuelva sostenible y compatible ambientalmente. Esta necesidad de un «desarrollo sostenible» está siendo reconocido cada vez más por las partes interesadas.

A pesar del aumento de los esfuerzos realizados por los países y la comunidad internacional en las últimas dos décadas, la pérdida de diversidad biológica ha aumentado a una tasa todavía mayor. La destrucción de los hábitats, su sobre-explotación y la descarga de substancias dañinas está conduciendo a la pérdida irreversible de recursos. Las razones para esto son los patrones de producción y consumo que niegan los principios de gestión sostenible. El turismo está directamente involucrado en este problema, que es de vital importancia para el futuro de la humanidad de dos maneras.

Primeramente, un número grande de estudios realizados a nivel mundial han demostrado que el turismo, en sus varias formas, comparte de manera importante la responsabilidad en la pérdida de especies y hábitats. La localización errónea de las facilidades turísticas ha contribuido a estos, lo mismo que la realización de las actividades de ocio en áreas sensibles o la introducción en el ecosistemas de substancias dañinas por parte de los turistas.

Por el otro lado, es precisamente el turismo en que, en muchas áreas, ha contribuido significativamente en la conservación de la biodiversidad. Los recursos biológicos están siendo protegidos debido a que se ha descubierto su valor turístico. Así, lo que ha llegado a conocerse como Turismo de Naturaleza se ha convertido en uno de los instrumentos más importante para la conservación de la naturaleza.