Evelyn Hong escribió, en See The Third World Whilst It Lasts (Business Times – 1985):
Shanlaan Vapes For SaleLos turistas y las facilidades turísticas se han engullido valiosas tierras agrícolas, arruinado playas, marcado laderas con cicatrices y contaminado vías acuáticas.
El concepto de turismo sostenible se origina para contrarrestar esta tendencia. Dado que ha partir de los años 80, el turismo se ha convertido en el principal ‘artículo’ en el comercio mundial, la idea de turismo sostenible definitivamente es de valor. Citando un panfleto de Tourism Concern (Going Travelling):
Con demasiado frecuencia, el desplazamiento es el precio real del turismo, y la gente local es quien lo paga; tu forma de vida, tradiciones y cultura cuenta para nada si tu hogar queda en una costa idílica, en una montaña fresca o entre templos antiguos. Si vives en un país con abundancia de sol y una industria turística creciente, y si tu tierra es apropiada para un nuevo complejo de playa, un campo de golf, un parque «safari» o un lugar de cultura y herencia, podrías estar en el medio del desarrollo lucrativo. Lo mejor es que hagas tus maletas o te vayas -o bien serías desalojado de tus propias tierras.
La industria turística es grande. Si fuera un país, fuera el tercer país más rico del mundo y está creciendo -en cinco años será la mayor industria del mundo.
Por lo tanto, hay un fuerte incentivo para discutir y debatir como podemos promover un turismo «sostenible y responsable«.
El desarrollo sostenible ha sido definido como un patrón de transformaciones estructurales de índole socioeconómica que optimiza los beneficios sociales y económicos del presente, sin poner en riesgo el potencial para obtener beneficios similares en el futuro. Por tanto, el turismo sostenible es todo aquel turismo (ya sea basado en recursos naturales o no) que contribuye al desarrollo sostenible. Al concluir nuestro milenio, es evidente que toda actividad turística debe integrarse al gran rubro de turismo sostenible. Pero eso no significa que todo el turismo deba convertirse en ecoturismo u otra forma de turismo de naturaleza. Habrá gente que quiera seguir viajando para visitar las grandes ciudades y los parques de atracciones, divertirse en los centros de playa y en los casinos y centros nocturnos o ir de compras a los grandes centros comerciales. Pero todas estas modalidades turísticas deberán convertirse en procesos de desarrollo sostenible.
El turismo sostenible requiere de una buena gestión ambiental, aunque no necesariamente tiene que basarse en la naturaleza ni ser educativo. Sin embargo, la sostenibilidad todavía es un concepto difícil de definir en la práctica. En particular, es vital el asunto de escala, tanto espacial como temporal. Por ejemplo, un establecimiento turístico específico puede producir, localmente, impactos ambientales importantes durante sus operaciones; sin embargo, al nivel regional estos impactos pueden ser de poca significación. Pero si varias instalaciones similares operan simultáneamente en la misma región, los impactos cumulativos pueden ser substanciales. Si hay poco desarrollo turístico en otras regiones del país en cuestión, entonces los impactos globales a nivel nacional pueden ser pequeños pero si el país depende fuertemente del turismo, los impactos nacionales puede ser significativos en una escala global. Y, ¿deben considerarse los impactos del turismo separadamente de los impactos de otros sectores industriales? ¿Es relevante que el turismo esté confinado a una parte del país, por ejemplo, si otras áreas reciben igual o mayor impacto de la agricultura, silvicultura, minería o de las industrias?
El sector turístico necesita de todas las herramientas del desarrollo sostenible: nuevas tecnologías, cambios en el comportamiento social, nuevas leyes ambientales, herramientas corporativas de gestión ambiental, mejor planificación y procedimientos de control del desarrollo, etc.